La selección española tiene en su mano estar entre los ocho mejores equipos de la Liga de las Naciones, los que en marzo de jugarán a ida y vuelta la presencia en la fase final. Defensora de la corona y presente en dos de las tres Final Four que se han celebrado, España dará es ese paso si derrota a Serbia esta noche en Córdoba.
El gol de Zubimendi a Dinamarca sitúa a España en esa posición de privilegio a las puertas de que se abra la segunda vuelta de un grupo. Para atravesar esa puerta, el equipo de Luis de la Fuente debe derrotar a una Serbia que se ha metido de lleno en la pelea por ser una de las selecciones del grupo que siga con vida en marzo en la Liga de las Naciones.
Su triunfo en Belgrado ante Suiza permite al equipo de Stojkovic soñar con esa posibilidad.Porque en su camino le queda la bala del último partido, que será ante Dinamarca en el Pequeño Maracaná de Belgrado.
Zarpazos serbios
Serbia no es una selección que haya logrado dar el paso en las fases finales que se espera de una selección siempre cargada de talento y que tuvo en 2015 una generación que fue campeona del mundo sub 20, la de Milinkovi-Savic, Rajkovic, Ilic, Maksimovic... Pero eso no quita para que sea un equipo espinoso, como le demostró a Portugal en Lisboa. Porque la impredecible Serbia mandó a Cristiano y a los suyos a jugarse la presencia en el Mundial de Qatar en una repesca en la que sólo el sorpresón de Macedonia ante Italia evitó un duelo italo-luso por una sola plaza.
Sin Lamine Yamal
España probará en Córdoba cómo es su juego sin Lamine Yamal, un jugador esencial en el equipo campeón y que capitaliza buena parte de las maniobras ofensivas,
Con el extremo dentro de esa impresionante lista de lesionados (siete del once de Berlín y diez de la lista de la Euro), De la Fuente moverá piezas en la delantera. La solución natural es la entrada de Bryan Zaragoza en el once, un jugador de regate, vertical y en estado de gracia.
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